Hace unos años atrás descubrí a un mae que se llama Dani Rovira, es un mae español que hace stand up de comedia, creo que también es bastante ambientalista y cuida mucho de los animales y no sé qué más hace, pero el maecillo es famoso allá en España y la verdad desconozco cuanta gente acá en Costa Rica lo conoce.
Yo creo que yo le di seguir en instagram y después descubrí que hacía, la verdad no sé como lo empecé a seguir.
Bueno la cosa es que gracias a ese Dani descubrí a otro maecillo que se llama Pablo Raez, este Dani hizo una publicación hablando de la fuerza de Pablo y la valentía, entonces no sé porque razón me dio curiosidad y también lo busqué en instagram y leí la historia del mae.
Se las voy a resumir lo más que pueda.
Pablo Raez también es español, según lo que yo vi en Instagram es un maecillo normal y corriente que le encanta tomarse fotos haciendo ejercicios y ver su avance con los músculos y todo eso que se hace en las redes sociales, muy guapo por cierto, como todo lo cuenta pues en una de todas las publicaciones puso que tuvo que ir al hospital y después de eso empieza la historia porque le diagnosticaron leucemia, la red social entonces la empieza a usar para contar su proceso, no crean que se quedó quedito, igual hacia ejercicios y lo más chiva de todo es que empezó a motivar a la gente para que donaran porque por lo se lee hay muy poca gente allá en España que dona sangre y menos donan médula, él empieza a decirle a la gente que lo haga y se pone una meta de un millón de donantes de médula, logra hacer toda una asociación para este movimiento de donadores.
A él le hacen varios implantes se dice? De médula y va en ese altibajo de mejorar y no mejorar, en sus días buenos cuenta de sus días malos y por lo fuerte y peligroso que es su tratamiento pasa hasta días seguidos totalmente aislado de visitas y de teléfono y de todo, ya cuando se siente mejor y pasa el riesgo pues pone al día su avance o retroceso cuando pasa algo malo.
En una de todas las veces que está mejor se va de viaje y conoce a una muchacha y hasta se comprometen para casarse, después Pablo recae, ahorita no se dé tiempo o en cuestión de cuánto tiempo paso todo, pero sigue ahora la lucha con la muchacha y recae y esta vez no hay solución sus defensas no suben y no logra hacer que las plaquetas suban y se pone mal y lamentablemente muere.
Chiquillos, no me inventé la historia, es la historia de una persona real, un mae que no llegó a cumplir 30 años de vida pero nos deja una enseñanza de vida preciosa, yo no sé yo como llegue a leerlo pero me motivo mucho desde que la leí, también me dio mucha tristeza porque era un mae saludable, joven y guapo y ahí es donde uno empieza a cuestionarse porque es que pasan estas cosas y porque nos enfermamos y peor porque nos morimos.
Este muchacho Pablo Raez fue el que me enseño a alzar mi brazo, mostrar mi musculo y decir #siemprefuerte.
Es realmente inspirador para mi, ya que como repito no se porque lo encontré y después pues yo salí diagnosticada también pues me ayuda como un alientos de que podemos luchar con nosotros, con la mente y el cuerpo a pesar de todo, ustedes tienen que ver la sonrisa de ese muchacho en todas las etapas de su tratamiento. Todo un héroe.
Ahora bien porque fue que lo recordé hoy más que nunca.
Les conté que lo descubrí por seguir a Dani Rovira, porque Dani lo conocía y lo admiraba por su fortaleza y de más. Bueno hoy me levante y revisando mi instagram me topé con una publicación de Dani Rovira y resulta ser que ahora él también está iniciando su proceso de quimioterapia.
No sé si tiene sentido chiquillos, pero me impacte. Yo soy una persona normal no famosa y bueno resulta ser que esta bendita enfermedad no perdona nada y me conmovió tanto que ahora los tres estamos en la misma situación, y Dani terminó su posteo recordando a Pablo Raez y su precioso #siemprefuerte.
Espero me hayan entendido, últimamente me impacto fácilmente con diferentes cosas de la vida y creo que en parte eso es bueno, siento que me hace más humana, más sensible y me genera más ganas de amar y muchísimas más ganas de ser un pequeño ejemplo de vida, ojalá y Dios así me lo permita, que cada persona que llegue a mí no se vaya nunca igual de como llego sino que se vaya con un poquito más de esperanza y con una sonrisa sabiendo que aunque la cosa este difícil se puede sobrellevar y si la voluntad de Dios es esa pues se puede superar.
Dios nos ayude realmente a todos los que tenemos esta bendita enfermedad y nos de fortaleza y mucha, mucha sabiduría para escurrir todo lo bueno que nos deja pasar por aquí y que como repito podamos ser mejores personas.
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